El principio de todo

«La mente lo es todo. En lo que piensas te conviertes.» Buddha.

IMG_6882

Ahora que ya todo ha terminado quizás te paras a reflexionar cómo es que ha pasado el tiempo de esta forma tan indecisa en la que, a veces, no eras capaz de ver el fin, y otras veces un acelerón súbito te transportaba hacia adelante.

Han pasado 6 años desde que pisase por primera vez el Hospital Universitario Virgen Macarena, un lugar demasiado ajeno en ese entonces y un ahora quizás demasiado familiar. Hace algo más de dos semanas que asistí a mi última práctica. Recuerdo salir del hospital ese último día con mi bata en la mano, mirar hacia arriba y sentir como un escalofrío recorría mi piel… En algún sentido he llegado a considerarlo mi casa. Al cabo tu casa no es un lugar, sino las personas que lo habitan, y por esta casa de 6 años han pasado personas admirables que han estudiado junto a mí esta maravillosa carrera, y otras tantas que, con su experiencia y conocimientos, nos han llevado de la mano para transformarnos de estudiantes a médicos.

Muchos de ellos ni siquiera sabían que pensaba en esto cuando los saludaba por última vez en un pasillo, de forma casual… cotidiana. No eres capaz de decirles que es muy probable que no volváis a coincidir, pero tal vez la mejor despedida sea aquella que no se hace.

DSC06465.JPG

Nos graduamos, ¡y de qué forma! Al margen de la belleza de la ceremonia en sí, compartir el momento en que se hace oficial tu sueño con tu familia, tu amigos, tus maestros es algo realmente mágico. Todos ellos conocen por donde has pasado y lo que supone para ti. En mi caso, recibí la beca amarilla que me titulaba como Graduado en Medicina y Cirugía de las manos de la Dr. Progesterona. Todavía se me eriza la piel cuando recuerdo el momento en que me nombraron, subí a la plataforma del Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla y vi a Paula con mi beca. Realmente muchos recuerdos y sentimientos colapsaron. Mi amiga, mi maestra en incontables ocasiones, una Dra admirable tanto personal como profesionalmente, me pasaba aquel 28 de mayo el testigo. Una médico honrando a otro en una sucesión demasiado ceremonial, pero aún más íntima para nosotros. Finalmente, y con más de 2.000 personas observando, nos abrazamos y ambos rompimos a llorar.

De allí salí siendo oficialmente médico, pero no me sentí más médico que unas horas antes o que, incluso, 6 años antes. Realmente no sé cuándo empecé a serlo o si dejaré de serlo alguna vez. Lo que sí sé es con quienes cuento, quienes son mi verdadera familia tanto de sangre como por elección. Sé quienes me han ayudado a despertarme, a levantarme o a traerme de vuelta con los pies al suelo. Aquellas personas con las que eres capaz de soñar en voz alta y que te inspiran a convertirte en lo que realmente eres.

Pues sí… Graduado, al fin. Y médico orgulloso. En el fondo siempre supe que lo conseguiría, porque la fe y la convicción son algo muy parecido que nacen de lugares parecidos. Lei por algún sitio que ganar solo está al alcance de aquellos que están dispuestos a ponerse de rodillas, y yo me he arrodillado muchas veces por esta gran pasión, y seguiré haciéndolo cuanto sea necesario.

Ahora que todo a terminado vuelves a empezar, con ganas, con ilusión, con pasión… Y siempre acompañado de todos aquellos que supieron estar a tu lado, creyeron en ti y lucharon por tu sueño. Ahora que conquistaste la cima y disfrutas de las vitas lo haces el tiempo justo para fijar tu objetivo en otra cumbre. Ahora que todo termina…

naranjo12

EMPEZAMOS.

Dr. Neurona.

Un comentario en “El principio de todo

  1. Así es, siempre q se consigue una meta, hay q fijarse otra y a poder ser mayor para q siempre estemos en un proceso de superación de vida, ya q es lo q mejor alimenta nuestra existencia, te animo a seguir por este camino, cada uno dentro de sus posibilidades debería hacerlo por q la recompensa es ver cómo las superas,😘👏🏽👏🏽👍🏼.

    Me gusta

Deja un comentario